El pontíficie reconoce su amor por el séptimo arte, un arte que conoció en su infancia gracias a sus padres y que considera útil para “crear y custodiar la memoria”, sostiene en el prólogo de un libro sobre este tema.
“El cine enseña a crear y custodiar la memoria (…) En ese sentido, también para la Iglesia, la dinámica historia-memoria halla en el cine un importante referente”, dice en una entrevista en el libro “Lo sguardo: porta del cuore”, de Dario Edoardo Viganò.
El papa Francisco pone como ejemplo la fuerza de aquella tarde de marzo de 2020 en la que salió a una plaza de San Pedro vacía y lluviosa para pedir el fin de la pandemia: “Pienso en la densa memoria que esa imagen sedimentó en el corazón de muchísimas personas”, apunta.