Ensenada, 25 de noviembre de 2022.- Ante los repentinos cambios de temperatura y con el objetivo de prevenir enfermedades respiratorias en la temporada invernal, es importante tomar medidas para elevar defensas y evitar contagios.
La prioridad es extremar cuidados con los niños menores de 5 y mayores de 65 años de edad, así como y ciudadanía con capacidades diferentes, ya que son los grupos más vulnerables a las enfermedades de las vías respiratorias.
Es común que la comunidad tome precauciones cuando hay frentes fríos, pero es importante cuidarse todos los días, especialmente en las mañanas y noches, cuando se presentan descensos de temperatura que pueden ocasionar o agravar síntomas respiratorios.
Algunas de las enfermedades respiratorias más frecuentes son: gripa común, sinusitis, laringitis, faringitis, bronquitis, neumonía, virus sincitial respiratorio, adenovirus, influenza y Covid 19.
Por ello, es recomendable seguir medidas preventivas, como vacunarse contra la influenza y Covid 19, no saludar en forma directa, de beso o de mano a las personas con alguna infección respiratoria aguda, además de evitar tocarse la boca, nariz o los ojos antes de lavarse las manos.
Además es altamente recomendable consumir alimentos ricos en vitamina C, como cítricos; no compartir utensilios de cocina, ni otros objetos de uso personal con nadie; evitar ambientes que estén contaminados con humo de cigarro o sustancias que debiliten las vías respiratorias, como los aromas muy irritantes o polvos que se acumulan en casa.
También, se debe evitar la entrada de aire frío a las vías respiratorias, cubriendo nariz y boca, así como ventilar la casa-habitación adecuadamente, y mantener actualizada la cartilla de vacunación de los infantes.
Ante alguna alteración en la salud, debe recordarse acudir al médico y no automedicarse cuando se presenten síntomas en bebés y niños de respiración agitada o esfuerzo para respirar; sospechas de falta de aire; si el pecho se hunde cuando respira o se escucha un silbido al respirar; piel azulada por falta de oxígeno; irritabilidad y dificultad para dormir; o no querer comer o beber.